El camino espiritual de la no resistencia 12ª parte

Si quieres entender la tensión, empieza por darte cuenta de que llevas contigo un conjunto de nociones preconcebidas con respecto a cómo deberían ser las cosas. Basándote en estas nociones, ejerces tu voluntad para resistirte a lo que ya ha ocurrido. ¿De dónde vienen esas nociones preconcebidas? Digamos que ver azaleas en flor te pone tenso. Está claro que esto no es algo que inquiete a la mayoría de la gente. ¿Por qué te molesta a ti? Lo único que necesitamos saber es que en una ocasión tuviste una novia que cultivaba azaleas, y ella rompió contigo cuando estaban en flor, tu corazón se cierra. Ni siquiera puedes acercarte a ellas; te alteran demasiado.

El camino espiritual de la no resistencia 11ª parte

Estate dispuesto a examinar el proceso de resistencia. Para resistirte, primero tienes que decidir que algo no es tal como a ti te gusta. Hay muchos sucesos que te atraviesan sin dejar rastro.¿Por qué has decidido resistirte a éste? Algo dentro de ti debe tener una base para decidir cuándo dejar que las cosas te atraviesen y cuándo ejercer tu fuerza de voluntad para empujarlas lejos o aferrarte a ellas. Hay un millón de cosas que no te molestan en absoluto. Conduces cada día a tu trabajo y apenas notas los árboles y los edificios. Las líneas blancas de la carretera no te estresan en absoluto. Las ves, pero pasan a través de ti. Sin embargo, no asumas que es así para todo el mundo. Alguien que se gane la vida pintando esas líneas podría sentirse muy estresado si no están bien trazadas. De hecho, podría sentirse tan estresado que se negara a seguir conduciendo por esa carretera. Está claro que no todos nos resistimos a las mismas cosas ni tenemos los mismos problemas. Esto se debe a que no tenemos las mismas nociones preconcebidas de cómo deberían ser las cosas o de cuánto deberían importarnos.